Mis reflexiones sobre la temporada taurina del 2022.

Con la celebración de la corrida de Rejones (16 de octubre), en la Feria de San Lucas (Jaén), se dio por finalizada de forma oficial la temporada taurina de este año 2022.

Una temporada que para el buen aficionado a sido fifty-fifty por todas las circunstancias que han concurrido.

La parte más positiva de la temporada, ha sido las brillantes actuaciones del triunfador de la temporada, el genial maestro “Morante de la Puebla”, sin discusión alguna, el mejor en todo del escalafón de matadores, por calidad y entrega. Hoy en Ubrique (Cádiz), está toreando su corrida número 100, mano a mano con su paisano Pablo Aguado y el rejoneador Andrés Romero por delante. Arrancó en Valdemorillo, el 5 de febrero hasta ésta última de Ubrique el 29 de octubre.

No obstante habría que recordar que el de la Puebla fue el único torero que se echó a la espalda la temporada, a pesar de haber sido y es, el más discutido por todo, cuando ha sido el que más ha peleado por sacar la fiesta pa’lante en tiempos de pandemia. Toreando y matando encastes que hacía muchos años no se lidiaban por el solo hecho de “seguir, seguir y seguir, para que la fiesta no pare”. Veremos que pasa la próxima temporada. Pueden haber sorpresas. Se hablaba que había dudas sobre su posible retirada. Ayer en la entrevista que le hicieron pareció que no será así. Pero nada estaría más lejos de la realidad. Lo único cierto que hay, hasta el momento, es que el “Cigarrero” no hará temporada americana. Pero bueno, sea lo que sea, la verdad es que Morante ha hecho una temporada extraordinaria en todos los sentidos.

Dentro de la misma línea de positivismo, anotamos la vuelta a los ruedos de Alejandro Talavante, Emilio de Justo y Andrés Roca Rey, lo que supuso un suspiro de alivio para la mayoría de la empresas a la hora de confeccionar sus carteles de ferias. No sería justo eludir los nombres de “El Juli”, Manzanares, ni tampoco el impacto causado por la llegada del joven Tomás Rufo o el “peazo” de temporada que ha hecho Daniel Luque.

Otro de los que han vuelto, a ésta ya concluida temporada, es el sevillano Pablo Aguado, máximo exponente de la naturalidad y uno de los que mayor predicamento tiene entre los aficionados a la fiesta de los toros. Pero para mi forma de entender, ésta temporada que estamos analizando, aún sus compromisos no han cogido la altura que sí tuvo en el año 2019, cuando cortó cuatro orejas y salió en volandas por la Puerta del Príncipe de la Maestranza sevillana. Le seguiremos esperando, no cabe duda.

Cierran también temporada una terna de toreros, que tienen el concepto del toreo que más llega…que más gusta y emociona. Son en este caso: el riojano Diego Urdiales, el jiennense Curro Díaz, y el sevillano Juan Ortega, y quizás haya por ahí algún que otro más de los considerados “modestos” como: el “romaní” Alfonso Oliva Soto, con una reciente actuación asombrosa, el joven sevillano Ángel Jiménez, que siempre da la cara en sus actuaciones, o el moracho Ángel Téllez Gómez uno de los triunfadores de las corridas de San Isidro de Madrid. Mientras Córdoba vive ilusionada con sus nuevas promesas, Manolito Román y David “Fuentes Bocanegra” dos jovencísimos novilleros que si las cosas “marchan”… como deben, esperamos que lleguen a buen puerto, juntos con la novedosa aparición del niño torero, Marcos Pérez, novillero salmantino. ¡Gratísima sorpresa! y gran promesa del toreo.

En el lado opuesto, o sea la parte negativa de esta temporada, es el desencuentro que hubo entre la empresa gestora de las Ventas de Madrid, y el canal Toros de Movistar que dio como resultado, la no retransmisión por televisión de la Feria de Otoño. Un mal arreglo. Una manera de torcerse el brazo, el uno al otro, solo preocupados de sus propios intereses, para al final perjudicar y, de qué manera, al aficionado que es el que los sostiene. Puede ocurrir que ese mismo aficionado se canse de hacer el “gili….” y opte por darle la espalda a la Fiesta. Así estamos…

Antonio Rodríguez Salido.-

Compositor y letrista.-