Paco Camino merece con creces ser Hijo Predilecto de Andalucía.
Y lo merece porque es uno de los toreros más grandes, más completos, que ha dado la historia, sin la más mínima duda, con una cabeza privilegiada para entender al toro y darle la lidia adecuada (El Viti dijo en una ocasión, ¡Camino es el torero más inteligente de la historia!). Ha llevado el nombre de Camas, de Sevilla, de Andalucía y de España por todo el mundo taurino, como un referente del toreo clásico, profundo, puro, artístico, técnico y poderoso. Y todo esto no es que lo diga yo, es que lo dicen los verdaderos aficionados y, sobre todo, los profesionales. Como curiosidad citaré un día de tentadero en Fuente Ymbro, en el que estaba, entre otros matadores de toros y varios banderilleros, Manuel Benítez, El Cordobés, al que se le preguntó directamente, ¿para ti quien ha sido el mejor torero que has visto?, y sin dudarlo respondió, ¡Paco Camino, lo que pasa es que iba en una casa grande y no apretaba, pero si hubiese apretado nos manda a todos a casa! Ayer mismo hablando con el maestro Luis Parra, Jerezano, me decía: “Mira si sería buen torero, artista y poderoso Paco Camino, torero con el coincidió muchas veces en el ruedo, que jamás vi, ni ningún compañero podrá decir que alguna vez vio, que le llegara el agua al cuello al maestro Camino ante un toro. Cuando a los demás nos llegaba el agua al cuello a él no le llegaba ni a la cintura, todo era facilidad, naturalidad, arte y poderío”.
Triunfó en todo el orbe taurino de forma rotunda, indiscutible. En Méjico tuvo, al menos tanto cartel como Manolete. En Andalucía, concretamente, tuvo enorme cartel en todas las provincias, especialmente en Granada, donde toreó 16 tardes, y casi siempre llenaba o había muy buenas entradas, pues cuando se presentó de matador de toros el 17 de junio de 1960, acartelado con Manolo González y Antonio Ordónez, justo a los dos meses de haber tomado la alternativa, tuvo un grandioso éxito, pues cortó tres orejas, un rabo y una pata. Los tres salieron a hombros, pero la gente solo hablaba de Paco Camino. Al siguiente año puso el “no hay billetes” una semana antes de la corrida, que fue el 3 de junio de 1961.Pero también tuvo muchísimo cartel en Córdoba, Málaga, Almería, Huelva, Jaén, Jerez, El Puerto de Santamaría, Algeciras, etc. En toda Andalucía. En Sevilla triunfó muy fuerte cuando se presentó de novillero el 18 de julio de 1959 (ya venía en figura de los novilleros tras grandes triunfos en Zaragoza, Barcelona, el Puerto, entre otras plazas) cortando cuatro orejas. De matador de toros también tuvo grandes triunfos en la Maestranza; por ejemplo, y si no me falla la memoria en las fechas exactas, el 20 de abril de 1961 con un toro de Peralta, el 29 de abril de 1965 con un toro de Benítez Cubero (ese año actuó tres tardes en la feria de abril y las tres cortó orejas), el 19 de abril de 1966 le cortó dos orejas a uno de Cuadri tras faena de lio gordo, el 9 de abril de 1973 otras dos a un toro de Carlos Núñez, etc. etc. En definitiva, que en Andalucía, su tierra, también tuvo muchos grandes triunfos, aunque Sevilla creo que no le valoró en su justa medida, en toda su enorme dimensión como torero y como persona, tal vez porque cuando debutó en la Maestranza ya venía como figura, primero de los novilleros y luego de los matadores de toros; y posiblemente también porque el destino hizo que haya tenido que vivir mucho tiempo fuera de Sevilla y de Andalucía. Como decíamos triunfó rotundamente en todo el mundo taurino, si bien la plaza donde más y mayores éxitos tuvo fue las Ventas de Madrid, primera del mundo.
Algunos, sin conocerle en profundidad le han tildado de ser muy serio y distante, y al respecto yo, que creo conocerle bastante bien, debo decir que llevan razón, aunque no saben lo que dicen. Efectivamente es un hombre serio, un hombre íntegro, cabal, justamente la antítesis del chufleta, que cuando da una palabra la cumple a rajatabla; también es distante, pues cuando se le acerca alguien, que va pululando, para aprovecharse, con falsas alabanzas, falto de sinceridad y de verdad, como es muy inteligente, rápidamente lo capta y ese dura a su lado cinco segundos, los mismos que duraría al mío. De esos es distante.
En mi opinión, como persona es excepcional, amigo de sus amigos, que ha ayudado y ayuda a multitud de chavales que quieren ser toreros, a compañeros que lo estaban pasando mal, y me consta que a muchísimas personas que tenían problemas económicos y se han acercado a él buscando ayuda, pero como es un hombre que no gusta de estar en primer plano sino todo lo contrario, gusta pasar desapercibido, mantenerse en el anonimato, ello no ha trascendido a los medios. En nuestra opinión es un genio sabio, y al hombre sabio, verdaderamente sabio, no le interesa destacar entre los demás, no le interesan las alabanzas, no le interesa lo efímero, solo le interesa ser cada día un poco mejor y un poco más sabio. Podríamos resumir diciendo que tiene grandeza de espíritu, es decir, bondad, lealtad de corazón y humildad de alma, las tres virtudes indicativas de que se es un ser superior.
Así mismo me consta que el maestro Camino se siente muy sevillano, muy andaluz (aunque por los avatares del destino ha vivido mucho tiempo fuera de su tierra), y creo que como torero y como persona merece sobradamente ser nombrado Hijo Predilecto de Andalucía o, al menos, la Medalla de Oro de Andalucía, por eso, el maestro José María Montilla, decano de los toreros cordobeses, el empresario cordobés don Ángel Larrea y yo hemos presentado a la Junta de Andalucía una propuesta solicitándolo.
Rafael Comino Delgado.
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