EL ESPINAR MANTIENE UNA CURIOSA TRADICIÓN TAURINA 

En muchos pueblos de España, tienen lugar actividades taurinas tradicionales muy curiosas que aún se mantienen, pese a las continuas manifestaciones en contra de los partidos animalistas, que, dicho sea de paso, no se manifiestan ahora en contra de la cantidad de ganado bravo, que la pandemia que nos asola fuerza a enviar tristemente al matadero sin pena ni gloria. Y por supuesto, a los citados enemigos de la libertad no se les ocurre echar una mano a esos sanitarios que se están portando como verdaderos héroes en esos hospitales y residencias; están muy callados, vaya que a alguien se les ocurra enviarlos para cubrir esa labor, ya que disfrutan de las subvenciones recibidas, ahora más que nunca, sin dar un palo al agua.

Una de esas tradiciones tiene lugar en el Espinar (Segovia). "Los Quintos", jóvenes que iban al servicio militar, eran entrenados y se preparaban, pues tenían que torear y matar unas vacas. Cuando desapareció la mili, esta tradición continuó con los jóvenes que cumplían 18 años. Hace tres años los grupos animalistas junto a sus medios de comunicación progres lo escogieron como objetivo junto al Toro de la Vega y realizaron una terrible campaña coordinada. El pueblo, que había estado bastante dormido en su afición taurina, reaccionó ante estas agresiones físicas y tamaña mentira. La decisión popular fue sencilla y emocionante. Por un lado, recuperar la historia; el día de la fiesta, 15 de agosto, todos los Quintos que habían participado volvieron al pueblo y desfilaron en la plaza acudiendo a la corrida. Por otro, y unos de los más emotivos, todos los niños del pueblo, con sus padres y familiares celebraron ese día junto a la Fundación Víctor Barrio, la fiesta

del toro, con un encierro, clases de toreo de salón y concursos de redacción y dibujo sobre la tradición Taurina. El resultado lo podéis disfrutar en el video adjunto.

Otro pueblo que tiene una tradición similar es Casas Benítez, en la provincia de Cuenca, también amante de sus tradiciones, las que defienden a capa y espada, como debe de ser, algo de lo que adolecemos en muchos lugares de por aquí abajo. Así nos va y nos la cuelan por todos lados.

PD: por cierto…, según me cuentan nativos de aquellos lares, no se ha vuelto a saber nada de los citados animalistas ni de los susodichos periodistas. Seguramente, con aquella aparición, ya justificaron las ayudas del gobierno a sus actividades por un tiempo. 

Domingo Echevarría