MERECIDO
HOMENAJE DE BELMÉZ AL “TEMPRANILLO”
En esta época donde impera
el aborregamiento, donde los programas
de la llamada “telebasura”, tratan de crear mitos con protagonistas que ellos
mismos encumbran con su poder mediático, creando en la juventud falsas
ilusiones al hacerles pensar que sin sacrificio y sin excelencia profesional
pueden alcanzar el éxito que tienta a los seres humanos, nunca mejor ésta
sentencia flamenca: “cómo vas a comparar un charco con una fuente; sale el sol,
se seca el charco pero la fuente permanece”.
El arte del
toreo, como todo arte, es un acto poético porque sin nada más que un simple
trapo, el torero se enfrenta a un animal mastodóntico, que en cada envite,
tiene el fin de matarlo, y afrontando ese riesgo, el diestro es capaz de
transformar la materia irracional del acto, en armonía y belleza perfectamente
controladas. Así, el pasado 29 de agosto, en Belméz se hizo justicia,
inmortalizando una vida dedicada al toro, la de un torero belmezano de
adopción, que llevó Belméz por bandera: Tomás Moreno Ortiz “el Tempranillo”,
erigiéndole un busto junto a la plaza de toros de aquella localidad cordobesa.
Sobre las doce y media de la
calurosa mañana agosteña, el salón de plenos del ilustre ayuntamiento, repleto
de aficionados, representantes de peñas taurinas, toreros, críticos y
familiares del torero, aplaudían al comenzar el acto, al homenajeado,
acompañado del alcalde José Porras del Busto, los matadores de toros José María
Montilla, Pascual Mezquita y Javier Benjumea, los cronistas taurinos Pepe
Toscano, y el empresario taurino Manuel Cabanillas, que componían la mesa
presidencial. junto a Fernando Rivera, que abrió el acto, y Antonio Rivera, Presidente de la Peña Taurina local dedicada al diestro homenajeado. Todos ellos glosaron la figura de Tomás Moreno “el Tempranillo”,
conocedores de su sacrificada trayectoria en los ruedos, moderados por el
cronista taurino Salvador Jiménez. Seguidamente nos desplazamos a la plaza de
toros, donde el alcalde descubrió el busto obra de Miguel Ángel Carrillo Gómez.
Tras el refrigerio y almuerzo, María
Elena Pozo, componente de la Peña Flamenca local “Mina Aurora”, ofreció un
recital flamenco con la guitarra de Juan Jesús Bermúdez.
A las seis treinta de la tarde, tuvo
lugar una clase práctica dirigida por “el Tempranillo”, donde alumnos de la
Escuela Taurina del Círculo Taurino de Córdoba, lidiaron 4 erales de Justo
Barba.
Felicitamos ésta iniciativa, que
ojalá sea la chispa que encienda otros eventos, con los que los aficionados de
otras localidades reconozcan a hijos insignes, que como “el Tempranillo”,
dieron gloria y renombre a su tierra, y que sabemos, que por los malos tiempos
que corren para la tauromaquia, no lo hacen realidad. ¡Ánimo!
De igual modo reconocemos la labor
realizada por la Peña Taurina Tomás Moreno “el Tempranillo”, la Plataforma
Belméz 2014, y la Peña Taurina Manuel Benítez “el Cordobés” de aquella
localidad, así como a las firmas Ardepinsa S.L y Eléctrica Belmezana. ¡Enhorabuena a todos!
Domingo Echevarría
Vicepresidente Federación Taurina
de Córdoba