EL PROGRAMA “CÓRDOBA MEDIO DÍA” DE CANAL SUR ENTREVISTA A JOSÉ MARÍA TEJERO
El pasado 16 de octubre 2019, Canal Sur Radio entrevistó al gran subalterno cordobés José María Tejero con motivo de su retirada de los ruedos.
Dicha entrevista corrió a cargo de José Antonio Luque y Ángel Abellán.
Abellán: más de treinta años de carrera (33). José María Tejero se cortó la coleta en Arlés. Fue un novillero de éxito que se retiró un tiempo y volvió como torero de plata. En estos años ha estado en las cuadrillas de los toreros más importantes del momento, Enrique Ponce, con quien también estuvo su hermano Antonio; Manuel Benítez “El Cordobés”, Rivera Ordóñez u Ortega Cano, entre otros. Ha cosechado números triunfos. También ha creado un tipo de zapatillas antideslizantes en caso de lluvia y barro en el ruedo.
José Antonio Luque: Buenas tardes, José María, bienvenido.
José María: buenas tardes, bien hallado.
José Antonio Luque: seguro, seguro que está viviendo un momento especial de echar de menos lo que acabas de dejar ¿no?
José María Tejero: pues la verdad bueno… no. Curiosamente, quería ser torero desde los doce añillos o por ahí…, y tengo una anécdota: que estaba con mi hermano Antonio jugando al toro y, poniendo los palos, me pegó una
cornadita de la que tengo todavía la cicatriz; me dieron cuatro o cinco puntos. Esa fue la primera anécdota.
Abellán: ¿y la primera vez que se puso delante de una vaquilla o de un novillo pequeño?
José María Tejero: quiero recordar…, fue con mi padre, de manos de Fernando Tortosa, en una ganadería que había en Alcolea. Pertenecía a don José Hernández, más conocido entre los taurinos por “Joselón”; venía de una familia ganadera de Salamanca; tenía una punta de vacas. El mayoral se hizo muy amigo nuestro y, cuando el hombre estaba en Salamanca, nos echaba un par de vaquillas, tanto a mi hermano Antonio como a mí. Ese fue el inicio de ponernos delante de los animales.
Abellán: ¿y la primera novillada?
José María Tejero: la primera novillada creo que fue en las de promoción de la Escuela Taurina de Córdoba. La fecha… no me acuerdo; lo que sí recuerdo es que corté dos orejas y los hermanos costaleros del Caído me llevaron a hombros hasta el hotel.
Abellán: entonces eso era un ritual. Lo hablábamos antes fuera de los micrófonos, que antes los toreros paraban todos en el mismo hotel y eso le daba más grandiosidad a la fiesta.
José María Tejero: la verdad que es una pena que eso se haya perdido. Aquello invitaba a que los aficionados se acercasen al hotel, buscando la cercanía de los toreros que actuaban y hacerse fotos. Todos los diestros se solían alojar en el mismo hotel con sus cuadrillas. Los hoteles se engalanaban para recibir a los toreros, creando todo ello un ambiente que redundaba en el ánimo de acompañarnos y asistir luego a la plaza a vernos actuar.
Abellán: usted fue un novillero de éxito ¿por qué lo dejó?
José María Tejero: bueno…, pues… estábamos dos toreros en casa, mi hermano Antonio y yo. Mi hermano era mucho más constante y más formal para las cosas del toro. Yo era más revoltoso. Y como Antonio era mayor que yo, mi padre se centró más en él, y yo me quedé ahí más rezagadillo, me aburrí y decidí irme al ejército directamente.
Abellán: por cierto…, que… su padre también había estado en el toro…
José María Tejero: mi padre sí que estuvo en el toro, en la década de los sesenta, de hecho, llegó a torear con Paco Camino en un festival sin picadores…, José María Montilla, Paco Raigón… de esa época fue mi padre, y de él nos viene el veneno del toro.
Abellán: después de ese tiempo que se tomó usted, digamos como reflexión, vuelve a la plaza y vuelve como torero de plata…
José María Tejero: sí, ya por ese tiempo, cuando volví del ejército, mi hermano Antonio se había consolidado como figura de plata y ese fue la mecha que detonó el que yo decidiera incorporarme como torero de plata, en realidad siempre lo tenía como una asignatura pendiente, lo que pasa es que las cosas de la vida, de ahí hubo un paroncito y después ya entendía que mi vida era el toro, que era el momento de volver y así fue.
Abellán: en esos treinta y tres años que ha estado usted en los ruedos, ha estado con los mejores…
José María Tejero: de hecho, que puedo sentirme un privilegiado pues milité en las filas de los más grandes de ese tiempo: Manuel Benítez “El Cordobés”, Ortega Cano, Rivera
Ordóñez, “El Juli”, Morante, Enrique Ponce y de últimas con “El Fandi”… también suelto he actuado casi con todos, Javier Conde, “Joselito”, Pepín Liria… la verdad que pocos se me han quedado en el tintero.
Abellán: y también como torero ha tenido bastantes triunfos…
José María Tejero: pues a día de hoy son sesenta y dos los que me acompañan. La verdad que cuando uno lleva el toro en vena y se entiende que está uno en un momento dulce, no se le escapa un toro e independientemente de la plaza en la que estés, tratas de ser honesto en todas las plazas y con todos los aficionados, y la verdad que eso, en muchas ocasiones, me ha servido para puntuar.
José Antonio Luque: bueno… digo que podríamos acabar como empezamos: ¿y ahora qué?
Abellán: ¡eso! ¿Y ahora qué?
José María Tejero: pues ahora a disfrutar de mis hijos, que son lo que más quiero del mundo; en mi casa, mi mujer, mis padres y mi familia en general…
Abellán: pero el mundo del toro sigue presente…
José María Tejero: en el mundo del toro, el que nace torero se morirá torero y yo creo que nunca me desvincularé. No sé en qué posición estaré, pero siempre estaré vinculado al mundo del toro, que es lo que me ha permitido vivir dignamente y estaré agradecido eternamente al toro y al mundo del toro.
Abellán: y trabajando porque la fiesta continúe…
José María Tejero: está claro, todo lo que esté en mi mano que pueda sumar para que la fiesta goce de mejor salud del actual, ahí estaré.
José Antonio Luque: ocurre como en la radio, ese venenillo, cuando entra, ya nunca te va a abandonar.
José María Tejero, muchas gracias.
Domingo Echevarría y José Luis Cuevas.