" LA ILUSIÓN DE UN GRAN TORERO "

                  ENRIQUE  MARTÍNEZ  " CHAPURRA "

En el toreo muchos son los llamados y pocos los elegidos, todos los aficionados y publico en general conocen a las grandes figuras, también a los toreros populares o populistas, gente que han triunfado en la fiesta bien por sus condiciones o por las circunstancias que les rodean y que le llevan muchas veces a la popularidad sin tener unas cualidades extraordinarias.

Otros toreros no tienen tanta suerte y siendo grandes profesionales están prácticamente en el anonimato y solo los conocemos algunos aficionados, la suerte tan importante también en el toreo es fundamental y aunque todos cuando comienzan su ilusión es la de ser una gran figura se tienen que conformar con brillar a menor altura, el toreo es como la vida misma.

Enrique Martínez Zazo, nació en Andújar el 30 de julio de 1977, por sus venas corre el toreo ya que sus antecedentes familiares también respiraban toreria.

Debuto en publico en 1989, la plaza de Pinto en Madrid fue el escenario, su debut con picadores tuvo lugar en Noblejas (Toledo) corría el año 1994, se presento como novillero en las Ventas al año siguiente y también repitió actuación en 1999.

Llego al doctorado el 8 de septiembre de 2003 en la tierra que le vio nacer, su padrino Pepín Liria, como testigo Victor Puerto, corto las orejas a una corrida de Román Sorando.

Después la falta de oportunidades y esa suerte tan esquiva a veces hicieron que no alcanzara mas notoriedad en el escalafón.

Actualmente reside en Madrid y sin ser un torero famoso en los últimos años se a enfundado el traje de luces en multitud de ocasiones, sin que el publico muchas veces pueda disfrutar de sus excelentes maneras ya que actúa como sobresaliente y siempre depende de que los matadores titulares le dejen hacer algún quite.

En la provincia de Córdoba hemos tenido  ocasión de verle en bastantes festejos demostrando con el capote que reboza pellizco y torería, esperamos impacientes verle con la muleta pronto, porque es un torero con duende, gusto y enjundia y eso lo hemos comprobado en el campo.

Pero ante todo la principal virtud de este torero es la honradez, su gran afición, sus muchas ganas que hacen que la ilusión siga intacta para llegar a figura del toreo. Suerte Maestro.....

por: Pedro Ocaña Cantarero.