MANUEL FUENTES: VIVIR PARA LA FIESTA

LOS TOROS Y LAS MOTOS SU GRAN PASIÓN 

Ladislao Rodríguez Galán

El bisabuelo de nuestro personaje fue Manuel Fuentes "Bocanegra", pundonoroso matador de toros cordobés conocido por su valor y entrega. Y esos genes, quizás, le indicaron desde su niñez a Manuel Fuentes Castro que su destino estaría vinculado a la Fiesta de los Toros. Lo intentó en los años de juventud ese no era el sitio que este mundo sin igual le tenía predestinado. Efectivamente, Manuel que regentaba un prestigioso taller de automóviles, compaginó esa actividad con la de mozo de espadas. Y estuvo a las órdenes de numerosos toreros comenzando esta tarea en los años ochenta cuando se sacó el carnet de ayuda y fue con "Espartaco", Julio Robles, Ortega Cano, Luis Francisco Esplá...

Posteriormente, ya con el carnet profesional de mozo de espadas comenzó su labor con los chavales de la Escuela Taurina de Córdoba

para continuar con "Palitos" y con José Luis Moreno desde sus principios. Después estuvo, como ayuda, con Manuel Benítez "El Cordobés" y más tarde como mozo de espadas con Julio Benítez.

Su pasión por todo lo que rodea este maravilloso mundo del toro es tal que se hizo un experto en la fabricación de capotes de brega, de capotes de paseo, muletas y monteras logrando la máxima calidad en esta tarea. Después también fabricó guitarras (acaba de terminar una). Siempre con el sello de las cosas bien hechas por que Manuel es un perfeccionista.

Pero como todo llega en esta vida, el cuerpo le pedía tranquilidad, y dejó atrás viajes, angustias y vicisitudes vividas junto a los toreros. Su mundo se limitó entonces a su hogar donde tiene un rincón taurino con mucho sabor, con fotografías y recuerdos de una etapa que ya pasó. Allí, rodeado de imágenes y carteles, se siente feliz. Y además dispone del tiempo suficiente para disfrutar de su otra gran pasión: las motos. Pero no para correr, sino para restaurarlas. Le llegan muy deterioradas y con paciencia, cariño y mucha dedicación las convierte en auténticas joyas de museo. Una maravilla observar estos modelos recuperados tal y como salieron de fábrica hace más de cincuenta años. Es una colección, corta aún con Guzzi, Derbi, Lube,

Vatavusv (Holandesa), Pusch y Ossa palillo., pero muy llamativa que te sorprende sobremanera.

Pero ¡Hay! la tranquilidad se le ha acabado a Manuel. Y la culpa la tiene su nieto David que ha comenzado a caminar por el mundo del toro. Y lo está haciendo con paso firme. El chico, alumno de la Escuela Taurina de Córdoba, triunfó rotundamente en su debut en público el pasado mes de mayo en la becerrada homenaje a la Mujer Cordobesa. Este chico, pinturero y capaz ante el toro, ha vuelto loco al abuelo... que ya está otra vez volviendo a los tiempos del agobio y el sufrimiento. Volver a empezar, con la diferencia de que si siempre

ha considerado a los toreros, con los que ha ido, como de su familia, ahora es su propia sangre quien le necesita. Manuel Fuentes sabe, por experiencia y conocimientos, que esta es una carrera muy dura, pero ha visto en su nieto David Gavilán algo diferente, con posibilidades y aptitudes para la esperanza. Y esto le ha devuelto la ilusión al volver al mundo del toro, del que nunca se acabó de ir. Enhorabuena maestro.