martes, 9 de mayo de 2017

PREGÓN TAURINO DE CÓRDOBA 2017




Con el Salón Liceo del Real Círculo de la Amistad como escenario, e igual que se viene haciendo desde hace ya 28 años, se celebró la noche del pasado día 8 de mayo 2017, el Pregón Taurino de Córdoba. Éste año, como no podía ser de otra manera, dedicado a la figura del IV Califa del toreo, Manuel Rodríguez Sánchez “Manolete”, con motivo del Primer Centenario de su Nacimiento (1917-2017). 
Córdoba, deudora por muchos conceptos con este torero irrepetible, a quien Ricardo García “K-Hito” bautizó con el sobre apodo de “Monstruo” para la historia de la tauromaquia, se volcó completamente. El inmenso Salón Liceo de aquella Real Casa puso el “NO HAY BILLETES”. El atractivo cartel que rememoraba la histórica corrida Pro-monumento, celebrada en 1951, fue el efecto llamada para la categoría del evento, que tanto emocionalmente como en su organización, resultó cumbre.
Casi una hora antes, ya se mascaba el ambiente en las dependencias de aquella casa cordobesa, solariega, de belleza sin igual, y que tanta historia alberga de una ciudad tan taurina por los cuatro costados. 


El bello de punta se nos puso a todos los presentes, cuando al son del pasodoble dedicado por Orozco y Ramos al maestro, e interpretado por la Agrupación Musical “Cristo del Amor”, titular de la Plaza de Toros de “Los Califas”, hicieron el despeje a modo de paseíllo, los once toreros que tomaron parte en el evento, camino hacia el escenario: José María Montilla, decano de los toreros cordobeses, Manuel García “Palmeño”, que incluso con un brazo en cabestrillo, debido a una caída días antes, quiso estar presente en el mismo; Gabriel de la Haba “Zurito”, Manuel Cano “El Pireo”, Agustín Castellanos “El Puri”, Fernando Tortosa, Agustín Parra “Parrita”, Juan Antonio Cobos “El Garbanzo”, Fermín Vioque, Rafael J.

González “Chiquilín” y Enrique Reyes Mendoza. Fueron acompañados por Federico Roca, presidente de aquella ilustre casa; José María Portillo Fabra, presidente de la Tertulia Taurina “El Castoreño”, organizadora del acto; Manuel Vázquez, hijo de Pepe Luis Vázquez, el gran torero sevillano, compañero tantas tardes de “Manolete”, y Juan Lamarca, ex presidente de la Plaza de Toros de “Las Ventas” de Madrid, que tras dedicar unas emocionantes palabras de recuerdo a la memoria de “Manolete”, fue dando paso a la intervención de los toreros, tras elogiar cariñosamente a todos ellos, no sin antes dedicarnos las palabras que el maestro Julio Aparicio, le había pedido nos transmitiese, dado que no pudo asistir – quedo con la espina de mi deber y mi deseo de estar en Córdoba, a pesar de que sé que iba a llorar mucho hablándoles de “Manolete” -
La bienvenida la dio Federico Roca, presidente de aquel Real Círculo, a quien siguió el presidente de la tertulia anfitriona José María portillo Fabra, quien expuso que, la idea del acto se había basado en aquel cartel monstruo de 1951. Mientras en una pantalla se exponían como recuerdo, las fotos de los diestros que intervinieron aquella tarde, habló de ellos y, finalmente, con la silueta de la efigie en bronce que culmina el monumento a “Manolete” frente a la iglesia cordobesa de Santa Marina, recitó el poema “Hasta en bronce tiene algo” de Domingo Echevarría, autor también de los cantes, dedicados a “Manolete” que seguidamente interpretó el maestro Juan Antonio Cobos, que además de sus ya conocidas cualidades de gran torero, cuando se apodaba “Garbancito”, demostró, junto a la guitarra de Gabriel Serván, que también es un gran cantaor.

La intervención de los diestros fue altamente emocionante, pues todos ellos estaban visiblemente emocionados, y transmitieron sus sentimientos al auditorio. Uno a uno fue dedicando sus palabras de admiración y respeto a quien, como se dedujo de sus
palabras, fue espejo donde se miraron, sigue y seguirá siendo espejo de todo el que se enfunde un traje de luces. 
El destino quiso, que el número de toreros que intervinieron fuese el mismo que en el citado magno festival pro-monumento, idea del  crítico taurino "José Luis de Córdoba", y que contó con la ayuda de Carlos Arruza. 
El acto, definitivamente, no fue un Pregón más de los XXVII tan excelentes  ofrecidos ya por la Tertulia “El Castoreño”, ha sido un Pregón Monstruo, como ya apuntaba el cartel anunciador, y el que, indudablemente, merecía “Manolete”.
¡Enhorabuena a todos!

José Luis Cuevas
Fotos: José Luis Cuevas

No hay comentarios:

Publicar un comentario