UN MAESTRO DE LA ACUARELA:
RAFAEL ROMERO DEL ROSAL
Pronto se cumplirán 45 años de la de aquella primera exposición de acuarelas (1976), que preparó Rafael, para la Galería Céspedes de Córdoba. Y treinta y muchos..., desde que se entregó en cuerpo y alma, a crear arte desde varias disciplinas, pero sobre todo utilizando la grandeza y la belleza de la acuarela.
Su sensibilidad, su transformación espiritual, a la hora de crear, le permite manejar el pincel, el color y el agua, primero con poesía, y segundo con una incuestionable técnica. Es un maridaje del que no es posible prescindir, porque en toda obra creativa, llámese cante, pintura, escultura o toreo, si se hace con verdad y hondura, se precisa a partes iguales, de genialidad y de dominio de la técnica. Equilibrio necesario para elevar a sublime un brote artístico. Es la simbiosis, entre la impronta del arte y la razón.
De las aproximadamente treinta exposiciones –individuales y colectivas-, media docena de simposios, y la creación de una decena de carteles relevantes, resulta complicado elegir lo más granado de su vasta producción. Lo acertado por tanto, es contemplar la mayor parte de sus realizaciones, desde la admiración podemos llegar a una conclusión, que detrás de la obra existe una interpretación del tema desde el corazón, y que hay un singular dibujante y sin duda un maestro acuarelista. Que destaca, tanto con la acuarela, como con la plumilla, con la primera técnica innumerables obras, y con la segunda, por ejemplo recuerdo, el dibujo número cuatro de la “Colección Córdoba“, que trata de un bello rincón de la Casa Palacio del Marqués de Viana.
Pero ciñéndonos a la acuarela la que es maestro, tuvo mucho interés e importancia la exposición denominada: ”Los Patios de Córdoba“, donde nos deleitamos con la recreación y el encanto de los recintos más notables. Esta muestra, como todas las de Romero del Rosal, mereció la atención de muchos cordobeses.
Destacable también es el cartel de la restauración de la iglesia de San Andrés (año 2000), el cartel de las bodas de plata de los rocieros de Córdoba (año 2002) y en el 2005, el cartel anunciador de la Semana Santa cordobesa. Pero sin duda, las dos exposiciones que más expectación provocaron, fueron la de “Rostros y Miradas de Cristo”, celebrada en el mes de Marzo del 2007, en la iglesia de la Magdalena; y “Cancelas y Patios “ (2014) en el Real Círculo de la Amistad.
En la primera figuraban expuestas, 38 acuarelas en blanco y negro y la realización a color del cristo con el que fue obsequiado Benedicto XVI por la hermandad de la Misericordia, en Octubre del 2006. En cuanto a la muestra de “Cancelas y Patios”, expuso dieciséis acuarelas de cancelas y diecinueve referidas a los patios.
Se le nota a Romero del Rosal, en las expresiones de los cristos, que es un enamorado del mundo cofrade. Y así nos lo confirmaba:
Los rostros de los crucificados, reproducen de forma impecable, el dolor que a través de las pinceladas transmiten. Se adivina en sus dramáticos rasgos, el sufrimiento que inspira a su vez el sentimiento y la hondura de la saeta.
Otra de sus muestras importantes, fue la titulada “El Patio de la familia ROMERO DE TORRES a la aguada” celebrada en mayo de 2019. Es el primer pintor que ha recreado el patio tan ilustre familia.
Del catálogo de dicha exposición, copiamos un pasaje escrito por el director del museo José María Palencia, en el apartado dedicado a Rafael Romero del Rosal:
...” en el momento más álgido de su carrera como pintor, Romero del Rosal, que ha dedicado su vida a la acuarela, que ha pintado muchos rincones de Córdoba.../...se ha convertido también en el principal intérprete del Patio -Jardín de los Romero de Torres -”…
O lo que opina Eva María Romero -hija del pintor -, que esboza la carrera de su padre, y que entre otras cosas, se refiere a la pasión que pone en todo cuanto se refiere a su Córdoba:
...”Él ha sabido realzar la belleza de todo aquello que sus pinceles han tocado; desde la sencilla belleza de una gitanilla, hasta la belleza majestuosa de las puertas de la Mezquita y los triunfos a San Rafael. Todo ello, a través de una luz y paleta cromática vibrante que refleja su carácter abierto, alegre, vitalista y jovial, con la que no sólo ha buscado evocar la realidad, sino estimular los sentidos, transmitir sus sentimientos y abrir su alma a quien contempla su obra.”...
Volviendo a la anterior afirmación, de que el artista ha participado en una amplia relación de exposiciones, tanto generales, individuales, simposios, realización de carteles etc. , es obvio que no se trasladen en este resumido artículo, porque ese no es el objetivo y porque ya figuran de forma exhaustiva en los distintos catálogos de su trayectoria. Anotaremos por interesantes la realización en 2017 del Cartel de los Premios Averroes, el cartel de la Federación de Peñas (2018), el cartel de los Patios y de la Feria de Córdoba (2020), y apenas hace unos días, la donación de un cuadro en el que recrea al Cristo de las Angustias a la Iglesia que lo cobija, con motivo de cumplir el pintor cordobés sus primeros noventa años…
De los numerosos galardones y reconocimientos recibidos, recuerda especialmente:
El nombramiento de Socio de Honor de la Agrupación de Acuarelistas de Andalucía (2018), el Diploma de Honor de los Amigos de los Castillos (2019) y en este mismo año el Clavel de Oro de la entidad Claveles y Gitanillas.
Hace ya unos meses, saludé en su estudio a Rafael, rodeado de bocetos, de libros y de obras, trazando con los pinceles lo que la inspiración del momento le va marcando, mientras que lleno de vida, nos habla con vehemencia, de sueños, de ilusiones y de la Córdoba romántica por la que se desvive.
...”Las exposiciones que tenía previstas para el 2020 las anulé por el Covid-19. Y en este 2021, lo que tengo previsto es pintar mucho, pero sin pensar en exponer por el mismo motivo. Si bien, me han solicitado que programe una muestra, dedicada a obras a la acuarela dedicadas a los Patios. En el supuesto de que la propuesta llegue a buen fin, es probable que el lugar expositivo sería el del Palacio de Orive.”...
Rafael Romero del Rosal es un enamorado de Córdoba en toda su amplitud, pero en especial de sus bellos rincones, de la Semana Santa, de la sierra, de los patios y de la serena belleza de la mujer cordobesa.
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