REPORTAJES GRÁFICOS TAURINOS...
Y TEMAS VARIOS DE LA CÓRDOBA DIVERSA...
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EL PUENTECITO DE SAN RAFAEL
Dime, dime, puentecito,
puente de San Rafael.
dime por qué caminito
se lo ha llevaíto
para no volver.
¿Dónde está Julio Romero,
dónde está, por qué se fue?
Dímelo tu, puentecito,
puente de San Rafael…
No tiene nada que ver el puente de San Rafael que conocemos actualmente, con el puentecito de la copla. El primero, el que existe hoy, fue inaugurado en 1953 por Franco y la canción, dedicada a Julio Romero se supone que los autores la tenían lista a mediados de 1945. Un año después, de que Ramón Perelló saliera en libertad de la cárcel por asuntos políticos. Tan acertado y atractivo es el tema, que, como nos recuerda don Santiago Castelo, hoy, todavía, se oye el tema en cafeterías y centros regionales de la América hispana, como alimento de la nostalgia.
LOS AUTORES
Los autores de la Fantasía Lírica- Filigranas-, espectáculo en el que figuraba incluido el famoso Puentecito de San Rafael, fueron, el mencionado Ramón Perelló Ródenas (1903-1978)– poeta, músico autodidacta y letrista - y el compositor - colaborador artístico de Perelló-, Genaro Monreal Lacosta (1894-1974).
EL ESPECTÁCULO FILIGRANAS
La canción Puentecito, ha estado desde su alumbramiento, muy solicitada por importantes intérpretes de la copla, pero la versión que más ha contribuido a perpetuarse, y quizás la más oída, es la que hizo en su momento, Antoñita Moreno, genial y estudiosa intérprete, que inició su carrera con 12 añitos cantando saetas y que presentó la canción dedicada al pintor cordobés, en Málaga a finales del 45. Todo un ejemplo de precocidad coplera. Traslado al respecto, la nota informativa que de la presentación, incluía el periódico ABC del día dos de enero de 1946
.
…”PRESENTACIÓN DE ANTOÑITA MORENO EN MÁLAGA.-
…” En el teatro Albéniz de Málaga, y con el espectáculo Filigranas de Perelló y Monreal, ha hecho su presentación Antoñita Moreno…”…
…/ Ha sido una revelación, que sitúa a la joven y bella sevillana en primera línea. Se trata de un verdadero valor del cante andaluz”…
Antoñita (Antonia Moreno Valiente), nació el 9 de enero de 1930 en La Puebla del Río (Sevilla). Cuando contaba dos años y medio, el padre – guardia civil – es destinado a Sevilla, ciudad principal para la intensa y extensa vida artística de la futura cantante de coplas y canciones populares. Especialidad en la que, desde muy joven, saboreó el triunfo.
Tanto es así, que en la biografía autorizada de García Carretero, se asegura que existe un programa fechado en 1943, en el que viene anunciada la nueva tonadillera, en el espectáculo Sol de Andalucía despidiéndose del público sevillano, para iniciar una gira semiprofesional el 10 de septiembre del citado año… ¡ con trece años ¡
Poco después, dado el éxito obtenido en Sevilla, madre e hija marchan a Madrid. Allí es contratada en el Fuencarral, Price yTeatro Calderón.
Tras felices pasajes de sus comienzos, nos centramos en la parte que nos atañe del presente trabajo, y es la vinculación empresarial de la familia con el empresario malagueño Francisco Ruibérriz, dueño de los teatros malagueños: Albéniz y Olimpia. De esa sociedad nace la idea de encargar a Ramón Perelló y al maestro Genaro Monreal un espectáculo especialmente pensado para Antoñita Moreno. Surge entonces FILIGRANAS, creado su argumento a mitad del año 1945 y presentado el 29 de diciembre de ese año, en el mencionado teatro Albéniz. El formato del espectáculo, estaba basado en catorce cuadros artísticos. Uno de ellos dedicado a Córdoba, y dentro del armazón lírico del cuadro, figuraba la canción: PUENTE DE SAN RAFAEL.
Filigranas, se presentaría en Madrid el 21 de enero de 1946.
…”Anoche se presentó en el teatro Cómico, el espectáculo Filigranas, conjunto de cuadros de arte popular o Fantasía Lírica.”…
…”Como “estrella” de Filigranas, figura la gran cantaora Antoñita Moreno”…
SITUACIÓN REAL DEL PUENTECITO
El puentecito, formaba parte del paisaje del entorno del Cementerio de San Rafael. Pues permitía el paso seguro de peatones y carrozas fúnebres. Salvaba años atrás el importante arroyo de Piedras Negras, que bajaba atropelladamente por su cauce, que prácticamente discurría por la Avenida de la Viñuela actual. Según cuentan los historiadores de la Córdoba antigua, el arroyo discurría por delante del cementerio, paralelo a la antigua carretera de Madrid, seguía por la espalda del Matadero etc…
Y efectivamente ese puente o puentecito, fue testigo del triste final de muchos entierros, entre ellos el del pintor de la mujer cordobesa…
Debajo de una zona del puente ha pernoctado alguna persona necesitada. Incluso, como cuenta el escritor Estévez: “En 1916, Antonio Gutiérrez Gómez, panadero del Parque de Intendencia, permaneció escondido debajo del puente, un mes de mayo, por el simple hecho de haberse dejado un mechón de pelo en el cogote, pues pretendía lidiar una becerra y para aspirar a torero era preciso lucir la preceptiva coleta trenzada…
Cuentan también que por los años cuarenta y tantos – la cita está fechada en 1948 –los inquilinos del solicitado ojo del puente, eran los Salpullíos, que desde una posición privilegiada… presenciaban el paso de los entierros. Seguro que con talante más bien aburrido, pues significaba asistir sin estar invitado… a los últimos pasos tristes de un cortejo cariacontecido, y la rutina les había hecho soportar el ambiente de forma respetuosa, sin soportar una vela que nadie le había dado en ese entierro… Era el momento de que el campanillo de la espadaña del cementerio, les avisaba a todos: a los del puente, a los vecinos y a los sepultureros, de que alguien acudía buscando paz…
Idéntico ritual siguió el personaje de la copla, ese gran pintor y cordobés, que se llamó Julio Romero de Torres, quien realizó el último paseo, sin su galgo Pacheco, por las calles de Córdoba, el día 12 de mayo de 1930.
Cordobesa, cordobesa,
quítate ese traje negro
y mata en flor tu tristeza,
que vive Julio Romero.
que duerme, que está durmiendo,
no llores que lo despiertas,
y está velando su sueño
su chiquita piconera.
La letra de Perelló, poeta sensible donde los haya, retrató el episodio de una forma bellísima. Su letra, y la colaboración fundamental de Genaro Monreal, hicieron de la copla un canto tan importante, que junto al recuerdo del maestro Julio Romero, se asoma siempre, la letra y la música de una canción sin fecha de caducidad, titulada: El Puente de San Rafael….
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