jueves, 9 de abril de 2020

Jueves Santo en Córdoba. 


Padre Jesús Caído


Virgen de La Soledad

Tarde nublada aunque sin amenaza de lluvia. En la Iglesia de San Cayetano son las cinco de la tarde y como de costumbre los toreros, vestidos de traje oscuro y con la medalla al cuello se estarían saludando antes de acompañar en estación de penitencia al Caído y a la Virgen de La Soledad, titulares de la conocida como “cofradía de los toreros”.
En 1676, el maestreescuela de la Iglesia Catedral dona la Sagrada Imagen de Nuestro Padre Jesús Caído a los Carmelitas Descalzos del convento de San José (San Cayetano). Son los antecedentes de la hermandad que se funda como tal en 1765.


La cercanía de la Iglesia con el barrio del matadero viejo es el primero de los lazos que uniría al Caído con el mundo taurino. Nombres como el de José Dámaso “Pepete” engrosan el número de hermanos de la cofradía Carmelita. Pero el primer vínculo relevante se remonta al siglo XIX, cuando tras la reorganización de la cofradía en busca de un mayor esplendor, se nombra en el 15 de febrero de 1880 a Rafael Molina Sánchez “Lagartijo” como Hermano Mayor.
Conocida es la faceta altruista y solidaria del primer Califa del toreo, como famosa fue la donación que realizó a su Padre a modo de una túnica morada bordada en oro, guardada hoy día como reliquia en la casa hermandad.
La etapa de Rafael Flores González iniciada en 1919 con su nombramiento como hermano mayor dio continuidad a la unión del toreo con la cofradía del Caído. Además de conseguir que el número de hermanos superara los trescientos, se ejecutaron mejoras y proyectos como el estreno del nuevo paso en 1921 y la colocación de las andas doradas.
Pero desde el punto de vista taurino, el hito alcanzado por Rafael fue lograr la vinculación a la hermandad de la mayor figura del toreo en la historia, Manuel Rodríguez Sánchez “Manolete” ya que este estaba apoderado por el hermano de Rafael, José Flores “Camará”. De modo que el 10 de diciembre de 1939 y sin haber cumplido el año de alternativa, el diestro de Santa Marina pasa a formar parte de la lista de hermanos mayores de la cofradía.


La figura de Manolete realza aún más la importancia social del Caído, y en la nómina de hermanos destacan los nombres de “Machaquito”, la esposa de “Guerrita”, o la cuadrilla al completo del hermano mayor.
A su vez se desarrolla una etapa de esplendor en la que se estrena el paso que a la postre sería el definitivo, para el Señor de los Toreros. La obra es del tallista cordobés Rafael Valverde Toscano.
Tras la muerte del “Monstruo”, su madre doña Angustias dona a la hermandad un varal para el palio de La Soledad en el año 1950.
El recuerdo y la presencia del torero cordobés en esta cofradía se plasma cada Jueves Santo cuando la comitiva en la plaza Conde de Priego pasa delante de la figura escultórica de Manolete y la banda de música de la Virgen del Mayor Dolor en su Soledad interpreta los sones de la marcha “Paz Eterna”.

Es hasta 1962, año en el que se culmina el proyecto de palio para el paso de la Virgen, en el que no suena de nuevo el nombre de un torero para ocupar el puesto de hermano mayor. Se piensa esta vez en el diestro Agustín Parra “Parrita” pero ante la negativa del matador para ocupar dicho cargo, Rafael Gálvez del Cerro se ve en la obligación de mantenerse en la dirección de la cofradía.
Es tanta la repercusión de la hermandad en el mundo del toro que en 1966 es nombrado al histórico periodista taurino de Villa del Río, Matías Prats Cañete, como
hermano mayor. Sin embargo, las complicaciones de gestión en la distancia desde Madrid hacen imposible la labor y dedicación que la hermandad requiere, finalizando su mandato en 1979. En su lugar es nombrado Rafael Jaén Toscano que dará un nuevo impulso conformando dos cuadrillas de costaleros para los dos pasos de las imágenes titulares, dando así un aire fresco de juventud a la Cofradía de los Toreros.
Es llegando a final del siglo XX cuando de nuevo una figura del toreo se vincula de manera especial a la hermandad del Caído.


Se trata del maestro Enrique Ponce que, junto con el gran banderillero y también hermano y devoto de la cofradía Antonio Tejero, organizan conjuntamente un Festival taurino cuyos beneficios irían destinados a la restauración del paso del Señor.
El cartel definitivo del festejo celebrado en 1997 estuvo compuesto por el rejoneador Leonardo Hernández hijo, y los diestros José María Manzanares padre, Miguel Báez “Litri”, Enrique Ponce, Rafael Jiménez González “Chiquilín”, José Luis Moreno y el novillero Rafael Sánchez Pulido.
Precisamente, uno de los componentes de ese cartel, es uno de los últimos de los toreros que han organizado un evento taurino en beneficio de la cofradía de San Cayetano.
La devoción de Chiquilín al Caído y a la Virgen de la Soledad es de sobra conocida.
Tal es así que el diestro de Santa Marina eligió para el día de su doctorado en Córdoba un vestido nazareno y oro como homenaje al color de la túnica del Señor. Fue una buena elección puesto que Rafael cortó dos orejas aquella tarde triunfando en día tan señalado. Y veinticinco años después, conmemorando esa efeméride, Chiquilín celebró una fiesta campera en la que congregó a más de 200 personas y cuya recaudación fue destinada a Cáritas y a la obra social de la hermandad de Jesús Caído. El entonces hermano mayor Rafael Madueño, manifestaba que “le honraba que Chiquilín hubiera elegido conmemorar su alternativa con un acto benéfico para su hermandad”. 



Toreros veteranos como José María Montilla, Agustín Castellano “El Puri”, Fernando Tortosa, Juan Antonio Cobos “Garbanzo”, familias toreras como los Zurito o los Saco, diestros más actuales, como los ya nombrados Enrique Ponce y Chiquilín. Moreno, José Luís Torres, banderilleros como Pepín Fernández, los hermanos Tejero, Rafael Gago (padre e hijo), periodistas como Pepe Toscano, novilleros y demás gente del toro seguirán caminado detrás del Caído llenando de aroma torera las calles de Córdoba cada Jueves Santo. 

Rufino Gomera Martínez.
Cronista taurino de Onda Cero Radio


UNAS FOTOS DEL RECORRIDO QUE HACEN LOS TOREROS DETRAS DEL CAIDO








Rafael González Chiquilín, José Luis Torres, Pilar Soria Y José María Montilla

Chiquilín, Rafalito Lagartijo Y Antonio Tejero



Chiquilín y Fede

Antonio Tejero, Rafael Gago y Figuerola

No hay comentarios:

Publicar un comentario