INTRO JUAN ORTEGA “NO HAY BILLETES” 7 OCTUBRE 2020

Nuestro invitado de hoy a No Hay Billetes es Juan Ortega, el torero revelación de la temporada. Juan se asoma tímido a las conversaciones donde no se habla de toros, se va de erasmus cuando pisa el asfalto de los problemas del día a día, por miedo a meter la pata, donde no salga aquello que subraya por la mañana, las costuras de la afición que a uno le falta para presentarse a un examen de febrero. A Juan sus amigos le llaman el Mata, el permiso que da la amistad deja que uno le descafeínen el jugarse la vida. Mata, de matador, de matador de toros. Se le veía entrenar en el parque cruz conde con la hierba en la boca, con el sabor a mojama de esa pasta salada con la que Valle-Inclán sugería que se alimentaban los toros. Juan es ingeniero agrónomo por si acaso, por ese miedo posmoderno de no poder fiarte de una sociedad que viva con el miedo de no pagarle la vocación.

 Juan se levanta antes de que salga el Sol para alimentar a una ganadería legendaria, los blancos veraguas, antaño animal casi heráldico de la nación, con la trivialidad que da la disciplina germánica del triunfo callado con falta de soberbia, pero no de ambición.

 Pepe Luis Vargas se acerco a él hace 5 años para preguntarle por qué no toreaba. Vargas habla a través de aquella cornada juncaliana a porta gayola en Sevilla, que le pudo quitar del tabaco, y ve en Juan el toreo umbilical del que le da el pecho a los toros. Habla con la devoción continuista con la que se refiere un padre a sus hijos, algo por desperfeccionar, la entrada de la ferretería que le espera en el camino opuesto al triunfo.

 Con esa actitud vuelve Juan a Córdoba, en un mano a mano con Morante de la Puebla en el Coso de los Califas. 12 de octubre, día de la HIpanidad. Algo soñado por inesperado. Las mascarillas esconderán las sonrisas, las muecas y los bienes de una tarde que pinta muy bien. 

ENTRADILLA: POR ÁNGEL ORTIZ

 Entrevista realizada a Juan Ortega por Rufino Gomera y los “no hay billetes”: Juanfran y Juan Romero.

Antoñete cuenta que en muchas ocasiones discutía con su apoderado porque le pedía que en cierto modo abandonase su concepto y buscase otros recursos que le hiciesen ganar más dinero y antoñete le respondía “prefiero estar tieso pero seguir siendo un torero”

 ¿crees que la pureza ha de ser la meta de cualquier torero?

Sin lugar a dudas es el camino que yo he escogido y el camino que quiero seguir hasta el final, fiel a mi mismo y fiel a lo que mamé desde que era niño.

Fue a partir de una tarde de verano en Madrid cuando vuelves a estar de nuevo en la boca de los aficionados e incluso llegas a una parte del público que aún no te conocía 

¿sentías que ese 15 de agosto de 2018 podía ser un todo o nada?

Pues....totalmente. Esa tarde hice el esfuerzo porque no me pesara saber que ahí podía o empezara todo o acabar todo. Era la oportunidad que tenía, estaba en el dique seco y sabía que esa tarde o pasaba algo o me podía ir para casa.

¿Cuál crees que es esa característica que tienen en común los toreros en los que tú te has mirado?

Pues que al final todo les sale de dentro y siempre me han llegado esos toreros que por encima de todo ha primado su sensibilidad y aquello que le salia, que le imprimía el toro, que le imprimía la tarde, que le imprimían las circunstancias y que se dejaban llevar por su interior. Eso ha sido siempre lo que me ha llegado y al final, lo que persigo.

Hola Juan,si no me equivoco es la primera vez que vas a torear con Morante y también debutas como matador de toros en Córdoba,

¿qué te da más vértigo de las dos cosas o qué te impresiona más?

(Suspira...) quizá Córdoba. Vamos, quizá no. Córdoba.Porque al final es una ciudad que cada vez que vuelvo a ella, me coge una cosa en el estómago o se me coge un pellizco y siento que estoy en deuda con ella. Siento que todo lo que ella me dio y todo lo que ella me hizo crecer, me ha puesto Dios la oportunidad para que se lo devuelva.

Puestos a soñar, viendo el cartelazo con el que debutas aquí en Córdoba, mójate y dinos cuál sería tu cartel soñado para debutar en Sevilla, en tu otra plaza. Ahora mismo mi cartel soñado en Córdoba, o sea perdón, en Sevilla sería un domingo de Resurrección con Morante, Juan Ortega, Pablo Aguado.Y por último para acabar, se da una circunstancia bonita ya que fuiste el primer torero que tuvimos aquí en la sección de “no hay billetes”, gracias a Dios conseguiste colgar en menos de 24 h el cartel de no hay billetes en esta corrida. Si salen las cosas bien, 

¿cómo lo piensas celebrar con tus amigos del “no hay billetes”?

Pues si....hombre si salen las cositas bien, algo habrá que “enrear” ¿no? (Risas) no torea todos los días uno un mano a mano con una figura del toreo y en una ciudad como Córdoba. Algo sobre la marcha improvisaremos. (Más risas)

Yo te quiero preguntar una cosa, es verdad que tú has vivido aquí , has estudiado aquí..., 

¿qué tiene el toreo de Juan Ortega que huela a Córdoba?

Pues al final.....no se. Eso de Córdoba que a mi me transmitía cuando yo estaba aquí era ese punto de entrega, ese punto de tratar el toreo con un respeto especial, con una seriedad especial pero siempre primando la naturalidad, siempre sin forzamientos con lo que te da, con lo que te surge de tu interior. Pero siempre con ese punto de respeto y de seriedad hacia el toreo.

Jose Luis Cuevas

Fotografías y Montaje

Tentadero en los Monasterios, de la ganadería familiar herederos de Jacinto Ortega 

Juan Ortega Y su Tertulia Tercio de Quites, que como todos los años asiste a un día de tentadero en los Monasterios