martes, 9 de diciembre de 2025

 ENTRE PINCELES Y LANCES

Hoy, en la Casa Natal de Julio Romero de Torres, hemos recibido al Círculo Taurino y a la Escuela Taurina de Jóvenes Novilleros de Córdoba. Su exhibición de toreo de salón y el homenaje “ENTRE PINCELES Y LANCES” llenaron nuestro patio-jardín de arte, emoción y cordobesismo.

Gracias por regalarnos una mañana inolvidable.

MANIFIESTO ENTRE PINCELES Y LANCES



Homenaje de la Tauromaquia Cordobesa Actual a Julio Romero de Torres en su Casa Natal

En mayo de 1930, tras la muerte de Julio Romero de Torres, José Francés escribió:

“O pasa como en este lunes de mayo —el entierro del pintor que tenía planta de torero y alma de cantaor, y para el cual su estudio de Madrid se encendía cada tarde como una casida ardiente al pasar por los labios de una mujer de harén.”

Así se despedía al artista que llevó en su pintura la luz, la hondura y el misterio del alma cordobesa.



Hoy, desde esta Casa Natal, donde comenzó a latir su genio, la Tauromaquia Cordobesa Actual rinde homenaje al pintor que supo mirar al torero no como oficio, sino como símbolo.

Unió dos artes que comparten raíz: el valor, la belleza y la verdad.

Lunes 08 de Diciembre en el Día de la Inmaculada Concepción.

Acto Círculo Taurino de Córdoba – Escuela Taurina de Córdoba.

Exhibición Práctica de Toreo de Salón, organizada con motivo de la Festividad de la Inmaculada y en homenaje a Julio Romero de Torres.



El encuentro cultural en el que los alumnos de la Escuela Taurina mostrarán su aprendizaje y dedicación en un marco artístico singular, rindiendo tributo a la memoria y legado del maestro Julio Romero de Torres.

Escuela Taurina del Círculo Taurino de Córdoba. Dicha Escuela es la más antigua de la geografía española y lleva paseando el nombre Córdoba y su provincia casi 50 años, habiendo adquirido un prestigio dentro del orbe taurino nacional e internacional, lo que prueba su hermanamiento con el Club Taurino de Beziers o el Club Taurino de Londres.




*1. Córdoba: donde empieza el mito*

En esta ciudad donde el sol cae como sentencia y se alzan los toreros como promesa, Julio Romero de Torres aprendió que el arte no vive solo en lienzos o academias.

Vive en las calles.

En las plazas.

En la música, la emoción y la memoria del pueblo.

Allí descubrió que los héroes cotidianos —los que atraviesan la arena con la soledad del que se juega la vida— también podían ser arte.

Y que el torero era, en esencia, una figura sagrada.

---

*2. Lagartijo: la primera sombra luminosa*

De Lagartijo heredó rumores, ecos y relatos.

“El primer Califa”, el que elevó la valentía a elegancia y la destreza a mito.



Julio no lo retrató, pero sí lo incorporó a su imaginario:

la figura eterna del torero que no muere,

que permanece,

que define una época y un carácter.

Lagartijo fue el pilar sobre el que se alzó un modo de sentir la tauromaquia… y también un modo de entender a Córdoba.

*3. Guerrita: el Califa que cruzó el umbral del estudio*

Con Guerrita, el mito se hizo carne.

El torero que dividió opiniones pero que multiplicó respetos, entró en el taller de Julio Romero de Torres como quien pisa territorio hermano.

Hablaron de toros, de arte, de vida y de silencios.

Guerrita era la mirada firme del que conoce la muerte,

y Julio, la mirada sensible del que conoce el alma.

Ambos, desde mundos distintos, se reconocieron en la grandeza de Córdoba.

*4. Machaquito: el retrato que se convirtió en leyenda*

Y llegó Machaquito.

La figura que el pintor no solo retrató, sino que transformó en un icono.

Cuando posaba, el estudio se volvía solemne.

Julio veía en él no solo a un torero, sino al hombre que lleva sobre los hombros la identidad de un pueblo.

En los ojos de Machaquito encontró lo que había buscado siempre:

esa mezcla de belleza y fatalidad,

de fuerza y destino,

que hace que el arte trascienda lo efímero y se convierta en eterno.

*5. Tres toreros, un solo pintor*

Lagartijo, Guerrita y Machaquito:



tres Califas, tres mitos, tres formas de entender la vida.

Julio Romero de Torres los convirtió en símbolos.

Los pintara o no, los elevó a la categoría de arquetipos:

la valentía, la maestría y la nobleza.

Su obra es también un coso simbólico donde el torero es presencia, sombra y alma.

Un espejo en el que la Córdoba taurina se sigue mirando.

---

*6. Córdoba: donde arte y toro caminan juntos*

Esta ciudad, que guarda en sus patios lo íntimo y en sus plazas lo eterno, sigue siendo el territorio donde el arte y la tauromaquia se dan la mano.



Hoy, en esta Casa Natal, la Tauromaquia Cordobesa Actual reconoce en Julio Romero de Torres a un maestro que supo escuchar la voz de su tierra y convertirla en belleza.

Un artista que hizo del torero un emblema, del pueblo una poesía y de Córdoba un mito.

Su legado sigue vivo cada vez que una figura cruza la plaza,

cada vez que un cuadro parece respirar,

cada vez que el nombre de un torero se pronuncia con orgullo.

*Hoy proclamamos:*

Que la tauromaquia es cultura.

Que Córdoba es cuna de arte y bravura.

Y que Julio Romero de Torres es, y será siempre,

el pintor que mejor entendió el alma del torero

y el pulso secreto de su ciudad.

Mensaje final a los jóvenes talentos del Círculo Taurino Cordobés

A vosotros, jóvenes que soñáis con la gloria del ruedo:

recordad que la bravura no nace solo en la plaza, sino en el corazón.

Sed fieles a vuestra vocación, honrad el arte que habéis elegido y llevad con orgullo el nombre de Córdoba.

Sois la herencia viva de una tradición y, sobre todo, la promesa de su futuro.

Que la luz de Romero de Torres y la fuerza de nuestros Califas os acompañen siempre.

Texto JUANJO GARLO


JOSÉ LUIS CUEVAS

Maquetador, Editor y Fotografías



















No hay comentarios:

Publicar un comentario